Me decidí a publicar esta receta tan simple porque desde que una prima de mi mamá se la pasó, hace ya unos cuántos años, siempre hice las palmeritas con azúcar y manteca, incluso sé que algunas personas las «pintan» con miel. Pero la semana pasada probé de hacerlas sólo con la masa de hojaldre y el azúcar blanca; como ven en las fotos, el resultado fue óptimo (¡y duraron muy poco!).
Ingredientes
1 masa de hojaldre rectangular
azúcar (de 8 a 10 cuharadas soperas)
Preparación
Precalentamos el horno a 180º; después espolvoreamos con 4 ó 5 cucharadas de azúcar nuestra mesa de trabajo y extendemos la masa de hojaldre fría (recién la había sacado de la heladera) sin el papel en la que venía enrollada, le pasamos el palo de amasar para que se pegue bien el azúcar y para que quede más fina. Después le ponemos las otras 4 ó 5 cuharadas de azúcar en la parte que va a quedar dentro de la masa y empezamos a enrollarla de cada lado hasta que se encuentren ambos rollos en el centro; entonces, ponemos un rollo sobre el otro. Presionamos con suavidad.
Luego cortamos las palmeritas de, más o menos, 1cm de espesor, con un cuchillo bien afilado.
Por último, las colocamos en la asadera donde las vamos a cocinar al horno durante 24 minutos dejando un poco de espacio entre una y otra porque crecen. Pasados los primeros 12 minutos estaban listas para darlas vuelta; entonces, las di vuelta con una espátula teniendo cuidado de no romperlas y las cociné 12 minutos más. En mi horno, este tiempo fue suficiente pero como siempre digo, los minutos de cocción pueden variar de un horno a otro.
Historias a la hora del té 